La detención de Ovidio Guzmán López, hijo del narcotraficante mexicano Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán ha dado lugar a una situación de completo pánico en la ciudad de Culiacán, al noroeste del país. Se han registrado detonaciones, tiros con armas de fuego y, según informan medios locales, habrían fallecido civiles. Por el momento, se desconoce el paradero del detenido.
El arresto de Ovidio Guzmán se produjo la tarde del martes y fue confirmado por el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de México, Alfonso Durazo. Este hecho provocó que las células del cártel de Sinaloa, organización criminal mexicana dedicada al narcotráfico, convirtieran Culiacán en un campo de guerra.
La violencia empleada por estos grupos armados ha hecho que el Gobierno de México se vea obligado a liberar al capo, quien tras horas de detención, ahora se encuentra en paradero desconocido. Ha sido Durazo quien ha afirmado la suspensión de dicha acción con el objetivo de salvaguardar “la integridad y tranquilidad de la sociedad culiacanense”. Tal y como informa la agencia Reuters, la decisión de liberar al hijo de Guzmán fue tomada de forma unánime por el gabinete. “Se tomó la decisión de retirarse de la casa, sin Guzmán, para tratar de evitar más violencia en el área y preservar la vida de nuestro personal y recuperar la calma en la ciudad”, dijo Durazo.
En medio de un caos incontrolable para las autoridades mexicanas, 20 reos fueron capaces de escapar de la prisión de Aguaruto, lo que no hizo más que aumentar las tensiones.
La liberación de Ovidio Guzmán López ha provocado una ola de indignación en México. Son muchos quienes consideran que “el narcoterrorismo tiene autoridad sobre el país, que ha pasado a ser un Estado Fallido Independiente”. La oposición no ha tardado en pronunciarse. El legislador del PAN, Felipe Fernando Macías, ha calificado el hecho como la “derrota más grande en la historia del país”.
Durazo ha confirmado que una patrulla de 30 miembros de la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional tuvo en sus manos a Ovidio en una vivienda de un fraccionamiento de Culiacán. “Varios grupos de la delincuencia rodearon la vivienda con una fuerza mayor a la de la patrulla mientras que otros grupos causaban acciones violentas contra los ciudadanos, lo que generó una situación de pánico”, ha manifestado el por el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana.
Por otro lado, también se ha confirmado la presencia en la ciudad del Gabinete de Seguridad del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, formado por la Sedena, la Marina y la Guardia Nacional. Todo con el propósito de mantener la situación bajo control.
Desde Oaxaca, el Presidente de México confirma que se dejó ir a Ovidio Guzmán.
— AJ+ Español (@ajplusespanol) October 18, 2019
"No puede valer más la captura de un delincuente que la vida de las personas".
Te detallamos qué pasó ayer en Culiacán. pic.twitter.com/1jEjBdfLPz