Tras un estudio, el periódico El Heraldo de Chihuahua reportó que luego de la presencia de más de 10 mil migrantes que se encuentran distribuidos en la zona norte del territorio mexicano, ha surgido el interés por contraer matrimonio con mexicanas, a fin de obtener documentos legales y buscar iniciar una nueva vida en México.
Salvadoreños, cubanos y hondureños son algunas de las nacionalidades que se encuentran registrados como contrayentes de matrimonio en el estado de Chihuahua, según los datos recabados por Registro Civil, que es la dependencia encargada de formalizar estos trámites entre las partes interesadas.
Ciudad Juárez, Jiménez y Chihuahua son los puntos donde más se registra la presencia de migrantes extranjeros, quienes con el paso de los meses han optado por juntarse con chihuahuenses para contraer nupcias a fin de obtener documentos mexicanos para tener una estabilidad en el país.
De 2018 a 2019, el Registro Civil reconoció que se ha registrado un incremento considerable en el número de matrimonios, que aparentemente se debe por la gran presencia de migrantes en el estado, pero que no se asegura debido a que los registros están clasificados por extranjeros y no como migrantes.
“Se puede decir que sí hay un incremento, pero no contamos con el dato exacto, porque en esta oficialía y en Juárez no se manejan los datos, pero sí ha habido un incremento por la cuestión de los migrantes”, dijo Palos Pacheco, coordinador de las oficialías del Registro Civil en la localidad.
“Ha habido un pequeño repunte, de repente nos ha tocado casar salvadoreños, cubanos o hondureños que se casan con norteamericanos o juarenses en las diferentes oficialías de la localidad”, agregó.
Las caravanas
El 13 de octubre del 2018 miles de salvadoreños, hondureños y guatemalteco partieron rumbo a México con destino final a EE. UU., en caravanas que incluía hombres, mujeres y niños; familias completas que buscaban un mejor futuro.
Después de un año, estos migrantes, así como miles que les siguieron en por lo menos otras cinco caravanas similares, no han logrado su objetivo. Muchos fueron deportados, otros aún permanecen en las ciudades fronterizas mexicanas con la esperanza de obtener asilo en EE. UU. y el resto, simplemente decidió retornar.
