Se conoce a un grupo por su líder. Así lo ha dejado ver nuestro país en los últimos treinta o más años. Se ha pasado de vergüenza en vergüenza.
Y esa verdadera vergüenza lo que sienten los militantes del Fmln al ver liderado a su partido por alguien señalado en la Comisión de la Verdad como violador de los Derechos Humanos.
El doctor Rodolfo Parker, ex representante de El Diario de Hoy y líder de la fracción del PDC encabeza la alianza ARENA-FMLN en este confuso tiempo, y se convierte en una mala copia del Moisés bíblico que pretende guiar a su pueblo afuera del desierto, pero vagando en él por cuarenta años.
Una estampa de lo que viven los partidos de derecha y de izquierda este 2020 que sus correligionarios creen más en la Siguanaba y en el Cipitío que en ellos, y al parecer, así como ese pueblo de Moisés estará perdido, con la única diferencia de que esa alianza está destinada al fracaso y a morir de hambre y sed.
Basta ver quién es el líder: Parker. Y es que este personaje ha tenido el timón de un barco fantasma llamado Partido Demócrata Cristiano (PDC), que no logra los votos suficientes para ser mayoría en la Asamblea Legislativa y sobrevive con los rastrojos dejados por el ingeniero Napoleón Duarte, y por los votos de algunos curiosamente convencidos en pueblos del oriente.
Hasta la fecha es un oscuro personaje que se ve en evidencia en La Comisión de la Verdad durante la guerra civil salvadoreña, para arrebatar el poder a René Aguiluz en el PDC y desde entonces ser el secretario general de ese Instituto político
¿Será que está alianza entre partidos del pasado terminará mal? Sin lugar a dudas, está condenada al fracaso tanto o más que su historia, al igual que las viejas costumbres políticas partidarias y el único período presidencial en el que tuvo el poder.
La gente tiene poca esperanza en los políticos, sobre todo en gente tan poco confiable como el representante del PDC. Y ahora que todos estos políticos dinosaurios están juntos, “¿quién podrá defendernos?”, como diría el Chapulín Colorado.
Lo seguro de esto es que habrá menos confianza ya que este diputado lidera a los partidos de antaña que se encargan de devorar y destruir al ya destruido pueblo salvadoreño que desea creer en alguien que actúe y salve a El Salvador.
De lo que no cabe la menor duda es que si este hombre lidera la Asamblea Legislativa y al traidor Fmln, lo único que podemos es dejarlos morir en su alianza y el pueblo salvadoreño debe ver un nuevo amanecer y trabajar por él.