Madonna no atraviesa su mejor momento, ni personal ni profesional. Hace casi una semana, la reina del pop tuvo que ser ingresada de urgencia tras ser encontrada inconsciente en su vivienda de Nueva York, siendo rápidamente trasladada al hospital a causa de una grave enfermedad bacteriana, que derivó después en una sepsis que afecta a los tejidos y órganos provocando un shock de insuficiencia orgánica e incluso la muerte.
Una enfermedad por la que, incluso, tuvo que ingresar en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), aunque tal y como han publicado diversos medios por medio de una fuente cercana a la artista, antes de eso ya tuvo que recibir una inyección del medicamento Narcan para “revivirla” y sacarle del mal estado en el que se encontraba.
Este medicamento sirvió para “ayudarle a revivir”, y es usado con frecuencia para superar el estado de una sobredosis de drogas.
De hecho, el Narcan ya le fue suministrado a la cantante Demi Lovato en el año 2018, cuando sufrió un shock por sobredosis de opioides.
Ahora, según esta fuente cercana, el estado de salud de la cantante de 64 años ha mejorado y se encuentra en su casa en Manhattan. Allí “está fuera de peligro” y “mejor”, y ahora se centrará en recuperarse para volver a los escenarios, dijo la fuente.