Foto: Cortesía
Tras el asesinato de una mujer a manos de su hijo, medios de comunicación revelaron los horrendos detalles del parricidio.
Los testigos relataron a la Policía Nacional de Honduras que antes de cometer el homicidio, el agresor, Jonathan Matute, de 39 años, estaba borracho.
La víctima, Iris Yolanda Matute, de 67 años, le rogó a su hijo que ingresara a la vivienda ubicada en la colonia Porfirio Martínez, en el municipio de Yoro.
Jonathan se habría enfurecido por los constantes ruegos de su madre para que ingresara a su casa, ya que era de madrugada.
El cuerpo de Iris Matute quedó tendido en la puerta de la vivienda, el análisis forense reveló que la mujer tenía 10 heridas en el rostro.
Según los testigos, Jonathan Matute fue capturado por un primo que le dio persecución tras el parricidio.
Los vecinos de la víctima precisan que Jonathan, que se dedica a las tareas agrícolas, se emborrachaba con frecuencia.

