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15 miembros de una estructura de pandilla fueron enviados a prisión, ya que se calcula que en un aproximado de tres meses recaudaron la cantidad de $35 mil a través de amenazas a muerte a 17 comerciantes.
De acuerdo con el registro fiscal, los procesados operaban en los municipios de Ozatlán en Isla de Méndez y Tierra Blanca de Jiquilisco, Usulután; y en San Carlos Lempa de Tecoluca, San Vicente.
Asimismo, las investigaciones determinaron que el dinero producto de la extorsión lo invertían en la compra de armas y droga.
Los imputados enfrentaron audiencia de imposición de Medidas en el Juzgado Especializado de Instrucción de San Miguel, el cual decretó la Instrucción Formal con Detención Provisional.
Tras ser capturados, a los pandilleros se les vincula los delitos de proposición y conspiración en el delito de homicidio, actos preparativos en el delito de droga y agrupaciones ilícitas.