El Presidente de la República, Nayib Bukele, denunció durante la noche del viernes ante la población los constantes ataques y bloqueos de parte de sectores de la oposición, contra los esfuerzos del Gobierno para salvaguardar la vida de los salvadoreños ante la pandemia de COVID-19.
A través de un programa transmitido en sus redes sociales, el mandatario expuso el bloqueo sistemático que ha enfrentado su Gobierno desde que el pasado 16 de enero tomó las primeras acciones contra el coronavirus.
El video fue divulgado para contrarrestar las mentiras que “los mismos de siempre” está lanzando, a través de una “campaña de desinformación” activada desde hace algunas semanas, dijo el Presidente.
Pueden ver el video que les anuncié, en Facebook Premiere, aquí: https://t.co/xiFaEJITWc
— Nayib Bukele (@nayibbukele) July 25, 2020
“Les comparto un vídeo para cerrar ya el debate, que no calen sus mentiras y todos estemos claros. Hasta los del 3%”, manifestó el presidente. Desde que inició su estrategia contra el COVID-19, el jefe de Estado fue atacado por la oposición, que lo tildaba de “alarmista”, a raíz de sus fundadas advertencias sobre la pandemia y por plantear la necesidad de preparar y recuperar el sistema de salud, abandonado por los anteriores gobiernos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el 11 de marzo al nuevo coronavirus como pandemia y el 18 de marzo se conoció el primer caso confirmado de COVID-19 en el país. Para el 21 de marzo, se declaró la cuarentena domiciliar nacional, para priorizar la vida de los salvadoreños por sobre la economía.
El Ministerio de Salud, con el apoyo de otras instituciones del Gobierno, desarrolló una gran labor en defensa de la vida de la población durante esa etapa, a pesar de los cuestionamientos de la oposición tanto adentro como afuera de la Asamblea Legislativa.
La declaratoria del Estado de Emergencia, el régimen de excepción y la declaración de zonas sujetas a control sanitario, entre otras medias, le permitieron al Gobierno controlar la pandemia.
El Gobierno construyó hospitales temporales para atender a pacientes de COVID-19 e implementó programas para proteger la economía de los salvadoreños, garantizando alimentación para las familias con la distribución de más de 3.4 millones de paquetes alimentarios, la entrega de un bono de $300 para las familias más vulnerables y la suspensión de pagos de servicios y créditos. También aumentó su capacidad de toma de pruebas de coronavirus para tener un mejor diagnóstico de la pandemia.
A pesar de los resultados positivos de las medidas sanitarias, los diputados ya no prorrogaron el estado de emergencia ni las herramientas legales para que el Gobierno combatiera la pandemia con medidas sanitarias.
Además, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) retiró al Gobierno las potestades legales de declarar zonas sujetas a control sanitario, la implementación de cuarentenas, el levantamiento de cercos sanitarios y otras herramientas.
El retiro de esas potestades al Gobierno generó tal impacto negativo que los casos comenzaron a incrementar de manera acelerada, desde menos de 100 al día, durante la cuarentena, hasta más de 400 actualmente. A la fecha se registran más de 13 mil contagios, cerca de 400 fallecidos, pero se han recuperado 7,455 personas gracias a los esfuerzos del sistema de salud.
Además, los diputados opositores han bloqueado el financiamiento para que el Gobierno atienda la emergencia y ejecute un plan de recuperación económica.
El mandatario condenó los constantes ataques a su gestión, para intentar desacreditar el gran trabajo realizado ante la pandemia. Las autoridades han advertido que el sistema de salud se encuentra al borde del colapso, por el incremento de los contagios. El 24 de junio el Ejecutivo solicitó la declaratoria del régimen de excepción para limitar la movilidad de las personas, el derecho de reunión y cambiar de domicilio, pero a la fecha, la petición ha sido ignorada por la oposición.