Foto: Imagen de Referencia.
El Juzgado 2º de Paz de Santa Ana autorizó en audiencia inicial la conciliación entre María Magdalena L., de 30 años, y Guadalupe Marisol M., de 40, luego de que la primera fuera acusada por la segunda del delito de amenazas con agravación especial.
Durante la diligencia judicial, la víctima mostró su deseo de conciliar con la víctimaria bajo las siguientes condiciones: que la imputada no la vuelva a ofender ni amenazar tanto en el ámbito público como en el privado; que no tome represalias contra ella; y que no la provoque por ningún medio.
Se fijaron tres meses como plazo para su cumplimiento. Además, se le advirtió a la incoada que de no cumplir con el acuerdo adquirido en la audiencia, se continuará con el presente proceso en el estado en que se hubiere dejado, a petición de la representación fiscal.
Los hechos que llevaron a la imputada a los tribunales ocurrió la tarde del pasado 20 de octubre del presente año, cuando la víctima se encontraba afuera de su casa y llegó una vecina a reclamarle por razones de chambres.
En ese momento, salió la imputada de su vivienda gritándole a la víctima y que le iba a mandar a los pandilleros para “taparle la boca”. Media hora después llegó un muchacho que ella no conoce y le preguntó si ella era Guadalupe.
Al contestar que sí, le entregó un teléfono celular y le dijo que querían hablar con ella. Al otro lado de la línea telefónica habló un sujeto que le dijo que si seguían los problemas con María, ella pagaría las consecuencias, ya que no querían que estuviera llegando la Policía al lugar.
Ante tal situación, la víctima sintió miedo y optó por denunciar el caso con las autoridades.
