Foto: Cortesia.
Una niña en Estados Unidos consiguió un regalo de ensueño: una sesión fotográfica disfrazada de sirena, como las de cuentos infantiles. Pero, no conforme con tener una sesión en el río, pidió que su papá la acompaña.
Sin pensarlo dos veces, este hombre se convirtió en sirena por un día y pasó junto a su hija una tarde muy divertida jugando en el agua.
La fotógrafa encargada, Desirae Deal, hizo un trabajo excepcional al capturar este lindo momento que quedará plasmado por siempre.
Una vez que compartió la sesión de fotos en su página de Facebook, un montón de comentarios positivos celebraron la actitud del padre y el bello trabajo que había resultado de esta dupla tan adorable.
La publicación original de esta sesión se ha compartido más de 100 mil veces en Facebook. No muchas fotos de cumpleaños alcanzan semejante exposición en redes sociales.

