Israel Gómez Albanés fue condenado a 35 años de cárcel por quitarle la vida a una víctima luego de negarse a tener una relación sentimental con él.
En el juicio, la Fiscalía General de la República (FGR) presentó abundante prueba que evidenció la culpabilidad del imputado.
El crimen fue cometido el 27 de mayo de 2019, en El Porvenir de Santa Ana; según un testigo con régimen de protección, esa noche escuchó los gritos de una mujer y luego observó al imputado caminando con una camisa amarrada en su brazo derecho y un corvo o machete en la mano izquierda.
Las pruebas científicas también demostraron la culpabilidad del imputado, por lo que el Tribunal Especializado de Sentencia para una Vida Libre de Violencia y Discriminación para las mujeres de Santa Ana lo condenó a la pena en mención.