Foto Bomberos El Salvador.
Personal del Cuerpo de Bomberos acudió a atender un reporte de una supuesta persona que se había lanzado en un pozo, en Usulután, durante la tarde del miércoles, encontrándose con una peculiar situación.
«El señor, en su permanente estado de ebriedad, le manifestó a una vecina que vendía golosinas a la orilla de la calle, que iba a lanzarse en el agujero dentro de su propiedad. Minutos después, la vendedora escuchó un golpe proveniente del interior del pozo, se acercó y vio que no estaban las láminas que lo cubrían», detalla Bomberos en su relato.
Ante esto, la mujer fue a la casa del señor y al no encontrarlo, alertó a la esposa del mismo y demás vecinos, asegurando que el hombre se había lanzado tal cual se lo mencionó, por lo que llamó a la policía.
Bomberos, al llegar al lugar de los hechos, realizó la inspección correspondiente en el pozo que tenía al menos 50 metros de profundidad, sin embargo, afirmaron que «no se observaba que la persona estuviese ahí. Nuestra experiencia en estos casos no daba lugar a que se hubiese lanzado, explicamos a la esposa y ante la insistencia de los vecinos esperaríamos a que flotara».
Tal como se lo esperaban, no había nadie dentro del pozo. «La experiencia nos apoyó, ya que a las orillas del terreno donde estaba el pozo, entre una crecida maleza, estaba el señor que supuestamente se había lanzado, el cual dormía placenteramente sin percatarse de la angustia de su esposa y de todo el movimiento que había causado», afirmaron.
El señor dijo a los bomberos que arrojó un tronco en la profundidad del pozo para que pensaran que él se había lanzado y así lo dejarán dormir. «Hablamos con el y le dijimos que eso no era correcto, que mucha gente se había preocupado pensando que estaba lesionado», detallaron.
