El Juzgado Especializado de Sentencia “C” de San Salvador condenó a 40 años de prisión a los pandilleros David Ernesto Villalobos Aguilar y Erick Geovanny Henríquez Gómez, por el delito de homicidio agravado.
Asimismo, fueron absueltos 11 sujetos (entre los que se encuentran los ahora condenados) por el delito de agrupaciones ilícitas, debido a que el testigo con criterio de oportunidad fue genérico e impreciso en su declaración.
Además, el juzgador manifestó en su fallo que el testigo nunca fue específico en dar las funciones para los acusados, asimismo, se contradijo en varias ocasiones, situando el ejemplo cuando el testigo dijo que para ser parrillero había que matar y que él si había matado, pero al ser cuestionado por la defensa, dijo que nunca había matado.
Según la acusación de la Fiscalía General de la República (FGR) infundían el terror en los municipios de Ciudad Delgado y Ayutuxtepeque, del departamento de San Salvador, pero esto no pudo ser comprobado con el testigo con criterio de oportunidad.
En cambio, lo que si se logró comprobar fue el hecho ocurrido el 25 de septiembre del 2015, donde el testigo con régimen de protección “Jacobo” dijo que mientras esperaba el transporte público en las cercanía de la colonia Santa Rita dos, del municipio de Ciudad Delgado, departamento de San Salvador.
Narrando que observó a dos pandilleros reconocidos de la zona que se acercaron a un vehículo y comenzaron a dispárale a los dos sujetos que se encontraban en el interior del vehículo, luego llegaron otros dos sujetos, pero no los reconoció porque salió corriendo al escuchar las detonaciones de las armas de fuego.
El juzgador dijo que el dicho del testigo era congruente con la prueba pericial y documental del caso, debido a que según las pruebas balísticas en el hecho participaron cuatro armas de fuego en el hecho, dándole valor a lo que el testigo había manifestado, por lo tanto condeno declaró culpables a los dos acusados por este caso.