El expresidente de la República, Mauricio Funes, reaccionó ante los señalamientos en su contra por las críticas vertidas desde nicaragua a través de las red social Twitter y que estaban dirigidas contra los periodistas de la revista Factum.
Dichos comunicadores fueron recientemente convocados por el Ministerio Público por una investigación abierta sobre los audios del exgobernante donde al parecer se revela que Funes compraba voluntades de diputados para que apoyaran los proyectos del Ejecutivo en su administración presidencial.
La FGR citó a los siete periodistas de Factum en calidad de testigos, para que revelaran la fuente que entregó los audios de Funes.
El pasado miércoles, el fiscal general, Raúl Melara, corrigió al director de la revista Factum, César Fagoaga, quien le hizo ver que el medio digital no sólo había subido los audios, sino que se trataba de una investigación, a lo que Melara le reiteró que «él hace su investigación (director de Factum) pero las verdaderas investigaciones son la que hace la fiscalía», dijo el fiscal.
Funes rechazó cualquier señalamiento sobre generar posibles amenazas en contra los periodistas del medio digital, como lo dejara entrever la activista de Derechos Humanos, Bessy Ríos.
«Ejercer el periodismo en este país es difícil, mal pagados, expuestos y sin protección. Uno esperaría que cuando se descubren cosas que todos sospechamos como compra de diputados toda la institucionalidad se vuelque a 1) protegerlos y 2) investigar #YoTeCuidoPeriodista», escribió Ríos.
La respuesta del mandatario indicaba que «Si lo dice por los audios presidenciales está equivocada. No estoy amenazando a nadie. Considerar a los de Factum como instrumentos de chantaje no es amenazar. Además, soy el más interesado que la FGR investigue para demostrar que los audios fueron editados y alterados», escribió Funes.