Imagen y Video Cortesía: Telenoticias 29 Chalatenango.
En el pueblo de Guarjila, departamento de Chalatenango, es muy conocida una mujer que se dedica al trabajo de la carpintería desde hace 28 años.
Se trata de María Amparo Chicas, quien por circunstancias de la vida, aprendió este oficio, sin imaginar que se convertiría en su fuente permanente de ingresos.
Según comenta, todo comenzó tras haber sido elegida por la directiva de su comunidad, para participar en un curso de carpintería en San Salvador; entonces pensó, “no está mal ir a aprender”, aunque confiesa que no tenía intenciones de vivir del oficio.
Sin embargo, su destacado desempeño le permitió ser elegida para viajar hasta Alemania en donde se especializo aún más en el arte de la madera.
Pero no todo fue fácil, pues asegura que durante el desarrollo de su curso de formación, sufrió discriminación por algunos de sus compañeros hombres, pues no la creían capaz de desempeñar esa labor.
No obstante, logró salir adelante y aún recuerda su primer trabajo. Doña María manifiesta que cuando vio terminada una caja ropera que fabricó, es cuando se dio cuenta que la carpintería era el oficio al que se dedicaría por el resto de su vida.
Por su parte, sus compañeros de oficio ven con agrado el desempeño de la mujer carpintera, pues aseguran que en El Salvador, muy pocas mujeres destacan en oficios a los que tradicionalmente se dedican hombres.
