El gobernador de California ordenó, el pasado lunes –ayer – desacelerar la reapertura del estado ante un vertiginoso aumento de los casos de coronavirus COVID-19.
La medida se refuerza luego de que los dos distritos más grandes del estado en materia de educación, Los Ángeles y San Diego, anunciaron que todo el aprendizaje será solo en línea cuando las clases se reanuden en unas semanas.
El gobernador de California, Gavin Newsom, cerró bares y prohibió el funcionamiento en todo el estado de restaurantes que no estén al aire libre, al tiempo que decidió también el cierre de iglesias, gimnasios y salones de belleza en los condados más afectados, pues los casos de COVID-19 están saturando hospitales en varios condados rurales.
Florida, Arizona, California y Texas se han convertido en los nuevos epicentros de la pandemia en Estados Unidos. Las infecciones han aumentado rápidamente en aproximadamente 40 de los 50 estados del país en las últimas dos semanas, según un análisis de Reuters.
Con información de Reuters.
