El Gobierno ruso anunció, el sábado, la imposición de visas para turistas chinos y la suspensión de visas de trabajo para los ciudadanos de ese país para combatir la propagación del nuevo coronavirus.
“Salvaguardar la seguridad del país, proteger la salud pública y evitar el contagio del nuevo coronavirus”, son el objetivo de las medidas, informó el sitio internet gubernamental.
En la orden, las autoridades rusas indicaron que los servicios de seguridad, Servicio Federal de Seguridad (FSB), a cargo de las fronteras, denegarán la entrada a los turistas chinos sin visa a partir de la medianoche del sábado.
Los grupos de turistas chinos podían viajar sin visa a Rusia desde 2000.
En cuanto a la interrupción de las visas de trabajo, el ministerio de Relaciones Exteriores se encargará de ello “debido a las circunstancias excepcionales y solo temporalmente”.
Rusia ya había suspendido el jueves las visas electrónicas a chinos, utilizadas en particular en el extremo oriental del país.
