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Dos mujeres fueron condenadas por el Tribunal 2º de Sentencia de Santa Ana tras ser procesadas por el delito de resistencia agresiva en perjuicio de la administración pública.
Dicho acto ilícito se encuentra previsto y sancionado en el Artículo 337-A del Código Penal, por lo que fueron enviadas a prisión.
Las imputadas fueron identificadas como Marta de Jesús Quijada de Rivas, de 38 años; y Sandra Corina González de Lucero, de 41.
Ambas fueron condenadas cada una a purgar una pena de tres años de cárcel, las cuales les fueron sustituidas por su equivalente a 144 jornadas semanales de trabajo de utilidad pública.
«Asimismo, se les impuso la pena accesoria de inhabilitación absoluta de pérdida de los derechos de ciudadano por igual período que cada una de las penas principales» detalla una fuente judicial.
De acuerdo con el expediente judicial, los hechos ocurrieron el 13 de enero de 2019, a las 10:05 de la mañana, en la 16ª. Calle Oriente, frente a la cancha de fútbol del Reparto IVU en Santa Ana.
Dos agentes decidieron intervenir a un sujeto que se conducía en una motocicleta, placas M-325677, porque intentó evadirlos desobedeciendo la señal de alto que los policías le hicieron.
Mientras se desarrollaba el registro al motociclista, a un par de metros del procedimiento, estaban las dos mujeres quienes comenzaron a lanzar insultos contra los agentes de autoridad.
Un hombre que observó todo les dijo a las mujeres que los agentes sólo hacían su trabajo; pero las mujeres comenzaron a caminar hacia los agentes y se lanzaron contra la mujer policía, causándole laceraciones en el cuello.
Quijada de Rivas, madre del motociclista detenido, tomó de la pistola propiedad de la Policía Nacional Civil (PNC) a la agente, para intentar arrebatársela, forcejeando para sacarla de la funda.
Por su parte, González de Lucero, tía del conductor de la moto, la tomaba del cabello para neutralizarla.
«Cuando los otros agentes se percatan de la situación, procedieron a apoyar a su compañera y neutralizaron a las dos mujeres. Asimismo, trataron de que la multitud que había en el sector no se involucrara», agrega la fuente.
En el lugar se desarrollaba un torneo de fútbol. Tras contener a las dos mujeres agresoras, se les puso bajo arresto
