(Foto/ Agencias)
Las autoridades señalaron que estas prácticas habrían ayudado a que se esparciera el virus en China, así que decidieron ponerle un freno. Si bien lo ideal era cortar estas dinámicas para detener el abuso animal y no para evitar la pandemia del coronavirus.
La epidemia de coronavirus que está afectando a un gran número de países ha dejado un número importante de fallecidos, sobre todo en China, donde surgió esta bacteria y en muchos casos de contagio y una histeria colectiva que está a punto de materializarse en una alerta mundial para prevenir la pandemia.
El pasado lunes, el comité permanente del Parlamento de China sesionó y aprobó una propuesta para prohibir completamente el comercio de animales salvajes. De acuerdo a lo informado por la TV estatal, la idea de la medida es “abolir la mala costumbre de consumir animales salvajes y proteger de forma eficaz la salud y la vida de la población”.
Por otra parte, el mismo Parlamento anunció que el empleo de animales salvajes para usos que no sean consumo humano, como la investigación científica, pasarán por una serie de rígidos controles e inspecciones en cuarentena, para asegurar de que no hay riesgo en los procedimientos.
Sin duda esta es una buena noticia, ya que China se caracterizaba por tratar a los animales salvajes sin ningún respeto, permitiendo su consumo y comercialización internacional como ítems para medicinas tradicionales por ejemplo, cuya eficacia no está respaldada por la ciencia.
De hecho, la medida fue activada hasta que baje la intensidad en la propagación del virus, y nadie sabe qué va a suceder después. Sin embargo, es un avance muy positivo hacia un mayor respeto por los derechos de los animales y esperamos que se vaya replicando en el resto de los países asiáticos.