La noche del martes, a eso de las 11:54, un potente sismo de 6.0 grados en la escala de Richter sacudió a El Salvador.
El movimiento telúrico fue sensible en casi en todo el país, y acá tenemos algunas reacciones de los salvadoreños.
Comenzamos con Mauricio M., de Mejicanos, quien manifiesta que a la hora del temblor se encontraba realizando actividades domésticas, pues temprano por la mañana, él y sus esposa salen a trabajar.
“Cuando me di cuenta (del sismo), rápido dejé lo que estaba haciendo y me fui al cuarto donde estaba descansando mi mujer y mi hijo (…) agarré al niño y lo abracé nada más”, comenta el abnegado padre.
Por otra parte, una mujer que se identificó únicamente como “Magda”, comentó que trabaja como agente de seguridad privada y a la hora del temblor estaba de turno custodiando unas oficinas en San Salvador. “cuando eso pasa, uno no se puede mover de aquí”, comenta.
Además, dijo que antes de contactarse con sus familiares, tuvo que dar el respectivo parte con sus superiores. “Eso es bien tremendo”, dice agregando que “los jefes de uno son mero estrictos”. Al final, pudo constatar que su esposo e hijos se encontraban bien.
Finalmente la reacción de Carla Melara, quien comenta que estaba preparando a sus pequeños para dormir, pues volvieron tarde a casa tras una celebración de cumpleaños de uno de sus parientes.
“Ayúdame con los niños”, exclamó la joven mujer, al percatarse que su compañero de vida no reaccionaba. Ambos salieron con sus hijos en brazos al patio de la casa.
Carla comenta que se le partió el corazón al ver a su niña llorando del susto; “En esos momentos uno tiene que ser fuerte por ellos (los niños), sino estamos perdidos”, concluyó.
El Salvador es un país altamente sísmico, no por gusto se le conoce en la región como el «Valle de las Hamacas”; no obstante, las autoridades constantemente hacen el llamado para que, en estos casos, la población guarde la calma y siga las indicaciones de seguridad debidas.