De acuerdo a Rafael Morán, jefe del Departamento de Deporte Inclusivo del INDES, se están atendiendo a ocho asociaciones y a las dos entidades deportivas, a las cuales se les da seguimiento a los atletas mediante los técnicos deportivos de dicha unidad.
“Como Departamento se mantiene una comunicación constante para saber el estado de los atletas y asimismo garantizamos que los mismos se mantengan activos”, dijo Morán.
Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, declaró el pasado 30 de marzo que «si nos quedamos en los 100 mil muertos habremos hecho un gran trabajo» acerca de la crisis del coronavirus. Esa cifra acaba de superarse, según los datos en directo contabilizados por Roylab Stats, a través de 45 fuentes internacionales.
Es casi el doble de los muertos en combate del país en la Guerra del Vietnam, y cerca de la cuarta parte de los sufridos en la II Guerra Mundial Con la diferencia de que aquellos cayeron en tres años y medio de guerra y estos en dos meses de paz.
El balance es aterrador: con una población de 328,2 millones de habitantes, Estados Unidos concentra en este momento 1.712 mil 626 casos de coronavirus en el momento de llegarse a los 100.000 muertos, lo que supone el 30% de los registrados en todo el mundo.

Las 100 mil víctimas son el 28,5%. mundial Uno de cada 192 estadounidenses está contagiado, lo que supone peor cifra que Bélgica y España, los países que hasta hace poco encabezaban este triste apartado. Con la diferencia de que el incremento de positivos estadounidense supera el 14% en los últimos ocho días, mientras el español, con un contagio por cada 198 habitantes, es del 1,9 %.
Uno de cada 1.710 estadounidenses infectados, y uno de cada 3.280 habitantes, ha muerto. El tratamiento de la pandemia del coronavirus por parte de Estados Unidos ha sido polémico desde el primer momento, con constantes tensiones entre quienes pedían que las medidas que se tomasen tuvieran como prioridad no perjudicar a la economía, y quienes ponían énfasis en tratar, ante todo, de limitar la expansión de la enfermedad y proteger a la población.
El presidente Trump siempre pareció mas inclinado hacia los primeros, llegando a avalar de facto las manifestaciones. También, sin embargo, respaldó las demandas y políticas de sus asesores médicos, Anthony Fauci y Deborah Birx, orientadas en este caso a luchar contra la pandemia.