(Foto/cortesía)
El hijo del expresidente de Honduras, Porfirio Lobo, fue asesinado la madrugada de este jueves junto a otros tres jóvenes cuando salían de una discoteca en el noreste de la capital hondureña, Tegucigalpa.
Tras conocer la noticia, Lobo hizo un llamado a las autoridades del país para que «tomen cartas en el asunto» porque la seguridad «se les está yendo de las manos», dijo.
«Quienes lo mataron son gente entrenada, mataron a mi hijo y su conductor (…) Los hijos duelen», dijo el expresidente.
Lobo, quien gobernó Honduras entre 2010 y 2014, ha incidido en que no todas las medidas de seguridad aplicadas anteriormente son malas, criticando así el nuevo rumbo aplicado por el Gobierno.
El hijo del expresidente de Honduras fue identificado por familiares como Said Lobo Bonilla, de tan solo 19 años.
Según el exdirector de Medicina Forense Denis Castro, por imágenes que ha recibido, se trata de un crimen que ha sido bien planificado.